ruptura sentimentalUna ruptura sentimental es muy similar al proceso de duelo que sucede cuando un ser querido fallece. Las etapas son las mismas. En una primera fase, se produce la negación, en la que la persona considera que la relación aún no está rota y que todavía es posible la reconciliación. Después llega la rabia y el enfado, en la que se busca la causa del fracaso sentimental. La tercera fase genera dolor y sufrimiento. Es el momento de llorar la pérdida de la relación y finalmente llega el proceso de aceptación y se asume lo que ha sucedido. Estas etapas pueden durar entre dos y cinco años.

La acupuntura es efectiva para reducir la ansiedad y esto unido a técnicas de liberación emocional, pueden ayudar al paciente a expresar sus sentimientos, comprender lo sucedido y aceptar la ruptura.

No es posible hacer desaparecer el dolor, ni borrar los recuerdos con una píldora mágica. Lo que sí es recomendable, es mantener una vida activa y controlar las cosas que te recuerden a esa persona. No es necesario escuchar una y otra vez esa canción tan especial, ni llevar puesto esos pendientes que te regaló, ver una y otra vez su Facebook, etc. Intenta no torturarte. También es recomendable separarte de los círculos de amistades de tu pareja para no sufrir demasiado.

Muchas personas, para suplir el vacío, buscan de forma precipitada una pareja nueva. Esto es un error común, ya que es un indicativo de dependencia emocional. La felicidad no llega a través del apego. Es importante aprender a ser feliz en soledad o con amigos. Vete al cine sola, apúntate a un curso, sal a bailar, intenta distraerte con amigos. Lo superarás.

Intenta no idolatrarle. Si la relación se ha roto, es porque algo no funcionaba. Es posible que la relación fuera tóxica. Seguro que volverás a enamorarte.

Piensa en ti. Machacándote y castigándote no conseguirás que nada cambie. Había cosas buenas, pero pesaban más las malas. Ahora es tiempo de realizar tus sueños y pensar en ti. Sin embargo, no tomes decisiones importantes hasta que hayas superado el proceso de duelo.

Recuerda que el duelo hay que pasarlo siempre. La terapia puede ayudar a acelerar el proceso y crecer personalmente. No es un fracaso, ni una injusticia. Tú te mereces una vida plena y feliz. Tú no eres tu pareja, eres mucho más que eso.